Categoría: noticias
Fecha: 22/09/2015

En las exposiciones se trataron temas como el aseguramiento de la información; fraude en las Empresas, qué y cómo hacen para detectarlo; monitoreo continuo de variables críticas; cómo mitigar el riesgo operativo; el valor y calidad de los datos, entre otros.

La Conferencia para Ejecutivos: Riesgos, Fraudes en Epoca de Crisis y la Responsabilidad de la Alta Dirección, realizó Interop Chile el pasado 15 de mayo, en el Gran Salón Don Alberto de Espacio Riesco.

Entre los participantes estuvo Jorge Mantiñán, quien expuso Sobre “Fraude Ocupacional: Cómo Establecer un Efectivo Esquema de Detección”.

El especialista comenzó su presentación dando las características del fraude: está oculto, la identidad del perpetrador es conocida, es un delito de alto rendimiento y existe bajo riesgo de descubrimiento.

Señaló que los riesgos que puede producir en las organizaciones son pérdidas económicas, erosión o pérdida de la reputación, conflictos regulatorios y colapsos de la compañía.

Añadió que un efectivo manejo del riesgo de fraude tiene 5 principios, entre ellos:
1. Gobernabilidad del riesgo de fraude
2. Evaluación del riesgo de fraude
3. Medidas de prevención del fraude
4. Medidas de detección del fraude
5. Investigación y acción correctiva

Algunos de los factores personales del perpetrador a considerar son el gusto de vivir más allá de sus medios, un deseo abrumador por ganar más, un elevado endeudamiento personal, una asociación estrecha con clientes y/o proveedores, la percepción de que lo que le pagan por las responsabilidades que tiene no son acordes, un fuerte desafío por “derrotar el sistema”, fuertes hábitos de juego y una exagerada presión de familiares y colegas, entre otros.

Entre los factores organizacionales a considerar están: asignar demasiada confianza a empleados clave, falta de procedimientos adecuados para autorizar transacciones, inadecuada separación de funciones, falta de controles independientes sobre tareas críticas, entre otros.

Un estudio realizado por Report to the Nation (ACFE) y que se realiza cada dos años, arrojó que en 2008 un 46% de los fraudes fueron detectados por denuncias y reclamos, un 20% por accidente, un 23% por controles internos, un 19% por auditorías internas, un 9% por auditorías externas y un 3% por notificaciones policiales.
Algunas herramientas informáticas de detección de fraude son:
– Diversos programas expertos para clasificar y “barrer” los archivos de datos
– El desafío de definir adecuados indicadores
– El aporte de la matemática: la ley de Benford y su aplicación a la detección

El presidente del Capítulo Argentino del ACFE, finalizó su presentación diciendo que la detección del fraude sólo será efectiva si se integra con un esquema general de manejo del riesgo de fraude, junto con principios y prácticas de gobierno, prevención e investigación de estos delitos. Más efectivo que detectar fraudes es identificar los riesgos de fraude. Los mecanismos y prácticas de detección deben integrar de una manera natural el conjunto de atributos de la gestión del “management” de todos los niveles.

Un saxofonista amenizó los coffee break con música ambiental, mientras los invitados disfrutaban de una selección de galletas de la casa, tapaditos de asado y roast beef, pastelería francesa, café, té, leche y jugos naturales.

El Seminario incluyó un almuerzo, cuyo menú fue ceviche de ostiones, calamar y pulpo, acompañado de una cama de lechugas hidropónicas y tomate cherry. Como plato de fondo se ofreció suprema de pavo rellena de camarones acompañada de papas con tocino y ciboulette en suave salsa bisquet. Y como postre hubo parfait de miel con arándanos y salsa de frambuesa.