Más de mil 600 integrantes de la Empresa de telefonía móvil disfrutaron en Espacio Riesco de una cena donde estuvieron presentes la magia, la entretención virtual y la música en vivo.
Al más puro estilo de las películas de espías, todos los trabajadores de Entel PCS recibieron en sus celulares un código personal e intransferible para ingresar al evento realizado en Espacio Riesco.
Más de mil 600 personas que a lo largo del país trabajan para esta Empresa mostraron sus móviles a unas bellas promotoras, quienes tras comprobar la contraseña con unos lectores láser, le daban a cada uno una importante misión: divertirse.
Así comenzó la gran cena con la cual Entel PCS dio la bienvenida al 2009. Un evento que combinó la magia, la entretención virtual y la música en vivo.
Tras sortear el cinematográfico control de acceso al evento, los empleados fueron recibidos con un exquisito cóctel y la primera diversión de la noche corrió por parte de las más importantes empresas fabricantes de equipos celulares que se hicieron presentes en la celebración. Cada una de ellas dispuso de una zona de juegos virtuales, donde destacó uno en particular: el del grito. Los concursantes tenían que alzar sus voces con todas sus fuerzas ante un micrófono durante cerca de un minuto para poder romper tres pantallas digitales.
Luego de una hora de diversión virtual, un espectacular show de fuegos artificiales dio inicio a la gran cena Entel PCS 2009.
Glamour, magia y música
Un imponente escenario lleno de luces y pantallas gigantes fue el telón de fondo para una comida que comenzó con un ballet que transformó una melodía clásica en una de ritmos modernos, fiel reflejo de lo que Entel PCS quiso plasmar en su fiesta: creatividad e innovación para seguir vigentes pese al paso de los años.
Por supuesto que en todo gran evento no podían faltar los animadores. La próxima anfitriona del Festival de Viña del Mar, Soledad Onetto y Juan Carlos “Pollo” Valdivia, fueron los encargados de darle aún más glamour a la noche.
Y cuando los invitados ya disfrutaban de la cena, una gigantesca caja negra fue instalada por cuatro hombres de trajes oscuros en medio del salón. En su interior había algo que dejó estupefactos a todos. Dos incipientes magos chilenos, conocidos como Magic Twins (que han aparecido en varios shows de Gigantes con Vivi) se sostenían en dos modestas cañas de bambú para permanecer sentados por 20 minutos literalmente ¡en el aire!
No fue el único acto de magia de estos jóvenes artistas. Tras el acto de levitación aparecieron nuevamente en escena para realizar otros impresionantes trucos.
Posteriormente vino el relajo musical a cargo de Juan Fé y las bandas Metropoli y Calypso, que hicieron bailar a los asistentes hasta altas horas de la noche. De esta forma el equipo de Entel PCS recibió un poderoso estímulo para comenzar de buena forma este 2009.